El Campamento Tortuguero “El Lobo Marino”, ubicado en La Bocana (Marquelia, Guerrero), tiene más de 20 años de vida, fue fundado por Don Roberto López Clemente. Don Beto (su apodo era El Lobo Marino) era uno de los “hueveros” (así se llaman los saqueadores aquí) de Marquelia, llega un momento en que decide fundar el Campamento para proteger la tortuga y empezar el cuidado de la tortuga como motivación de vida. En 2017 murió y dejó el legado a sus hijos. Inicialmente el Campamento se llamaba “Guadalupe Bettina”, en nombre de su hija, pero su muerte, y en su honor, se quiso cambiar el nombre a Campamento Tortuguero “El Lobo Marino”. Con la muerte de Don Beto se fueron también sus conocimientos y el Campamento quedó cerrado 1 año. Estaba desapareciendo. Fue entonces que Guadalupe Bettina y su mamá Conchita quisieron retomar y reconstruir el Campamento para continuar con la voluntad del difunto. Se reempezó practicamente desde cero. Poco a poco se fueron recreando las vinculaciones y reconstruyendo los conocimientos sobre la tortuga y se aumentaron cada año los nidos protegidos. Para la recolección de los huevos pasaron varias personas en apoyo, Roberto el hermano de Bettina, Alejandro el sobrino, Calleja ex huevero, Carlos un biólogo que se quedó dos años, Mateo un huevero de La Bocana y actualmente está Andrea un tortuguero de pasión de nacionalidad italiana que ya lleva dos años.

Actualemente, la infraestructura del campamento ha mejorado, se logró ampliar el corral de incubación a 3 veces el tamaño orginal ya que no lograba dar abasto con la actual cantidad de recolección de huevos. Ahora el tamaño del corral es de 19 x 15m El proyecto sigue creciendo poco a poco, pero con una voluntad fuerte y decisa como las tortugas.

En la temporada 2021/22 se recolectaron 463 nidos de Golfinas y Prieta, y 16 nidos de Laúd. Se liberaron 38,000 crías de tortugas aproximadamente.

En la temporada actual 2022/23 se recolectaron 463 nidos de Golfinas y Prieta, y 16 nidos de Laúd